domingo, 24 de diciembre de 2017

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Si alguna vez, por raro que sea, por imposible que parezca, lees esto.. Que sepas que te quiero.

Da igual cuando sea, da igual cuando me visites. Lo mismo da que sea mañana, el año que viene, o en otra vida. Seguire sintiendo lo mismo. Seguire con tu rostro en mi mente. Con tus palabras en mi oido. Con el dolor en el pecho al ver que ya no estas. Que no volveras.

Por increible que parezca, no me salen las palabras tan crudas como creia al intentar expresar todo lo que llevo encima dentro de este pequeño formato. No se por donde empezar. Por donde seguir. No quiero acabar..

Solo una cosa, antes de irme. Algo que si tengo claro, y que se repite en mi cabeza una, y otra, y otra vez.

Te amo. Fuiste el amor de mi vida. Eres el amor de mi vida. Seras el amor de mi vida. Pase lo que pase. Siempre.
Verte, mirarte, desearte. El recuerdo perfecto que ronda mi memoria. Una y otra vez. Tu y yo en aquel hotel, aquel dia. Tus ojos brillaban como no lo hacian tiempo atras. Tus labios humedos temblaban al ver los mios. Tu piel suave y desnuda, dispuesta a hinundarse entre las caricias de mis manos. Agitarse y respirar sin control, cuando mis dedos chocaron con tu cuerpo. Ruidos llenos de placer en la boca de mi oido, mientras mis manos se deslizaban por sitios insospechados. Querer mas, y mas, y mas. Susurrarte al oido que tengo hambre. Que quiero comerte. Hacer que tus problemas se hinunden. Que no se escuchen del ruido que quiero que hagas. Que se nos pase el frio a base de sudor. Esas imagenes que no se van de mi cabeza. Ese momento tan magico y rico. Ese recuerdo entre mi mami y yo.

viernes, 1 de diciembre de 2017

¿Por que? ¿Por que me acuerdo tanto de ti? Que a pesar de todo, sigo aquí. Después de tantos palos, tantas lagrimas, tantas peleas, tanta ausencia.. Sigo aquí esperándote, con ilusión a volver a verte, a volver a verte sonreír.
¿Por que no puedo? Dame una sola razón por la que no puedo pasar pagina. Dime porque las canciones me saben amargas. Explícame como pudiste hacerme esto. Enamorarme. A mi. 
¿Que tengo que hacer? Necesito que vuelvas a coger mi mano. Un cine juntos. Un evento a tu lado. Un te quiero, en la cama, mirándonos a los ojos. 
Quiero que el brillo de tu rostro vuelva. Por mi. Para mi. Quiero que sonrías, que te pongas colorada de las cosas que te digo. Necesito ver un ápice de calor en tus manos al tocar mi espalda. Deseo volver a jugar contigo, a ser niños, a putearnos y comernos..

viernes, 24 de noviembre de 2017

Hey. Hola. Que te iba a decir... Ah, si. ¿Te acuerdas? Si, ya sabes.. De aquello.. ¿Lo recuerdas? ¡Si! Ahí fue donde me enamoraste. Justo en ese lugar tan mágico, entre árboles y bellas vistas. Donde temblabas como alguien asustada. Ahí fue, en ese mismo momento, en que tu sonrisa de niña buena con un toque de mala apareció, de la nada, mirándome. Y yo sin saber que hacer, que decir.. Tenía muchas ganas de tocarte, de agarrarte para que te estubieras quieta. De besarte.. ¿Te acuerdas del beso que te pedí? ¿Te acuerdas que después tu me pediste otro? Que recuerdos, ¿verdad?...

domingo, 22 de octubre de 2017

Mi fantasía.

Imagínate un tu y yo. Imagina que día a día, mis ojos ven tu rostro durmiendo. Que te despierto cada mañana con caricias y besos, con un café caliente en la cama. Imagínate como sería un buen despertar todos los días, haciéndote sonreír por las mañanas, dándote motivos para que abras los ojos y te den ganas de comerte el mundo. Imagina la vida que podría darte, de besos, de caricias, de achuchones, de piques tontos, de cosquillas. Que cada día sea una aventura, algo nuevo. Que paseemos de la mano por todas las calles de la ciudad, que nos vean. Que nos vean. Que te vean feliz, y a tu lado que me vean a mi, mirando esa sonrisa que me da vida y me mata. Esa carita de niña picara, de loca, de ángel. Imaginatelo..

sábado, 21 de octubre de 2017

Poco a poco.

Existen de los pequeños. Como una mirada a escondidas, una de esas que lo dice todo. Una sonrisa, imposible de controlar. Ir por la calle y rozar su mano con la tuya. Las cosquillas entre risas de niños pequeños. Las ganas interminables de hablar. Una llamada por teléfono, de esas que nadie quiere colgar. Luego están los grandes. Los que marcan una gran diferencia. Locuras que parecen un sueño. Un abrazo con un toque de desesperación, provocado por un pensamiento negativo o una pesadilla, como si te fuese a perder. Que se ponga tu ropa y luego huela a ella. Un regalo absurdo, algo que lleves siempre puesto y que al mirarlo, te venga su imagen a la cabeza. Su cara, sus ojos tranquilizadores. Su respiración cerca de tu cuerpo. Caricias por partes insospechables. Besos inesperados. Que te coja por la calle y te abrace para sentir tu calor... Existen pequeños y grandes. Pero sean cuales sean, y sean como sean, los pequeños y grandes detalles marcan la diferencia. La diferencia entre quererte. La diferencia entre amarte. O la diferencia de estar locamente enamorado de ti.

La definición.

¿Sabéis esa sensación de calor, cuando estas cerca de ella? Esa que te queman las manos, por tocarla. Por deslizar tus dedos por su mano, por su cara, por su cabeza, por su cuerpo. Esa que te arden los labios por comertela a besos. Por clavar delicados sonidos húmedos en su boca, en su cuello, en su espalda. Esa que se te derrite el alma por tenerla al lado. Llamas que salen de tus ojos al verte reflejado en los suyos. Sofocones que te dan al escuchar y notar su respiración cerca de ti. Explosiones de extasis, con sudores fríos y calientes a la par, cuando te roza. ¿Sabéis esa sensación de estar jodidamente enamorado?.